¿QUÉ ES LO QUE HACE QUE DILATEMOS Y POSTERGUEMOS?
Abrís los ojos, miras el techo, agarrás el celular, empezás a scrollear las redes sociales, muchas veces sin siquiera prestar atención a lo que leés. Podés llegar a estar media hora por reloj mirando tu teléfono, detenido con una uña que se te rompió, poniendo de fondo el noticiero, y dejando que penetre de manera consciente o subliminal que el mundo está en guerra, que la economía no arranca, que hubo un asesinato nuevo y que vivimos en un mundo de desconfianza y corrupción.
Con esa psicología y “empuje” comenzás tu día (¡Dios!). Lo estoy escribiendo y ya me dan ganas de dejar este proyecto para más tarde y acostarme un rato…
Tenés que levantarte sí o sí, porque tenés una obligación que te empuja; pero si por vos fuera, te quedarías haciendo exactamente lo mismo que el que no tiene obligaciones horarias. No hay inspiración que impulse, no hay un motivo que nos haga despertar con entusiasmo, no hay un para qué vivir.
Entonces, ¿para qué hacer las cosas pendientes? ¿Para qué ocuparse de algo que puede esperar para más tarde, si nosotros mismos estamos dejando nuestro destino para más tarde? Si en este mundo sin esperanzas, ni confianza, nada de lo que soñemos puede funcionar.
Como verás, quizá yendo a un extremo, intento mostrarte que la procrastinación no tiene que ver con la postergación de una tarea aislada sino que tiene que ver con una falta de motivación general, una falta de fe en los propios sueños y en los casos más profundos una falta de sueños. Entonces terminamos dejando todo para después, y por ejemplo, yéndonos a dormir en una ilusión de que el sueño oculte aunque sea por un rato nuestra carencia de Sueños con “S”.
¿DÓNDE DEJASTE TUS SUEÑOS?
El 80% del éxito en cualquier cosa que hagamos depende de nuestra psicología y el 20% tiene que ver con cuestiones mecánicas. Muchas veces le damos a esas cuestiones mecánicas una importancia extrema (¡tengo que ir a pagar las cuentas!, ¡tengo que cocinar!), las hacemos más grandes de lo que son y haciendo un mundo de ellas terminamos estresados.
¿Qué hace que nos ahoguemos en lo trivial?
¿Qué es lo que hace que ir al banco se convierta en una tortura?
¿Qué es lo que nos invita a “dejar esas torturas para después”?
La respuesta es simple: Falta de sueños, visión y motivación.
Y es en este momento que voy a invitar a escena a un monstruito interno que todos tenemos, que a medida que pasan los años se va reforzando y se va instalando, a menos que lo saquemos de nuestras vidas de una vez. Vamos a llamarlo “EL ENANO MALAONDÍN”. Malaondín habita secretamente en cada uno de nosotros, susurrándonos al oído cosas que tomamos como las máximas verdades, sin siquiera cuestionarnos por dos segundos lo que nos está diciendo.
Y ante lo recién dicho Malaondín dice: “ah bueno, sí… ¡como si teniendo sueños, ir al banco se convierte en un placer de los dioses! No sé qué hacer, si irme a las Bahamas con una cerveza en la mano o si ir al banco a pagar la luz ñañañañañañañañaaaaaa” (Cabe destacar que nuestro monstruito interno puede ser tremendamente irónico).
Sabés que Malaondín, dale, andate a Bahamas y dejame accionar en paz!
Desde luego que no, que ir al banco no tiene por qué ser un placer, pero también sería interesante rever “por qué todo en tu vida debería ser un placer”…
Si todo fuera placentero, carecerías de problemas. Si no tuvieras problemas, estarías muerto. Los muertos no leen así que dejá este texto acá. Pero si tenés problemas, sabé que los problemas son “la resistencia que hace que desarrollemos nuestros músculos emocionales”. Los problemas nos impulsan a crecer, a desarrollar herramientas y recursos internos para poder avanzar y progresar en nuestra vida. Y es en la medida en que desarrollemos nuestros músculos emocionales que vamos a lograr elegir la calidad de nuestros problemas. Regulando nuestras emociones lo que hoy es un drama, pasa a convertirse en “una cosita más”, “un detalle”; para que nuestra energía no quede drenada y podamos accionar con conciencia hacia nuestros objetivos.
Aprendé a regular tus emociones y tus pensamientos y comenzá a accionar.
- Extracto del E-book ACTIVATE – CARO GP .