Formalmente, una llamada a la acción (CTA) es una declaración diseñada para obtener una respuesta inmediata de la persona que la lee o la escucha. Se utiliza en los negocios como parte de una estrategia de marketing para que tu mercado objetivo responda a través de la acción.
Una llamada a la acción es una oración imperativa que instruye al lector a realizar una tarea. Son absolutamente cruciales porque una vez que has conectado a tu audiencia con tu marca, ellos necesitan saber qué pasos tomar para obtener tu producto o servicio. Las buenas frases de llamada a la acción actúan como un rastro de migajas de pan que llevan a los clientes potenciales directamente a tu negocio o a tu oferta.
Por lo general, se usa al final, o en ocasiones, a través de un argumento de venta (es decir, una publicación que tiene como objetivo vender algún producto o servicio) para que los clientes potenciales sepan qué hacer a continuación si están interesados en lo que se les ofrece.
Parece obvio que la gente sepa el próximo paso para hacer negocios con vos, pero la verdad es que muchos dueños de negocios no tienen llamadas a la acción en sus publicaciones. Esto suele ser por una de dos razones:
1) Creen que el potencial cliente ya sabe qué hacer si está interesado en aprender más, o
2) Creen que las llamadas a la acción son desagradables y molestarán al cliente potencial… no quieren sonar como un vendedor de telemarketing.
Sea cual sea el motivo, dejar fuera las CTA en tus materiales de marketing puede significar perder clientes (y dinero).
Las llamadas a la acción son esenciales para dirigir a un cliente potencial hacia el siguiente paso del proceso de ventas.
¿En qué se utilizan las llamadas a la acción?
Los usos más obvios de una llamada a la acción son las ventas, como “¡Compra ahora!”
Sin embargo, el proceso de ventas no es el único lugar donde una llamada a la acción puede ser útil.
Especialmente si tenés un artículo o servicio de alto precio, en el cual puede que lleve un tiempo de reflexión al cliente potencial antes de animarse a comprar, una llamada a la acción que actúe como mapa u hoja de ruta hacia las ventas puede ser útil.
Por ejemplo, “Llame ahora para obtener un presupuesto gratis”, “Completa el formulario y agenda una sesión de consulta estratégica sin cargo”.
Se puede utilizar una llamada a la acción para hacer crecer tu lista de correo electrónico (“Regístrate para obtener un informe gratuito”), aumentar tus siguientes redes sociales (“¡Obtené más tips y material exclusivo siguiéndonos en Facebook!), mantener a los lectores en tu sitio web( “Haga clic aquí para leer más sobre …”) y mucho más.
Llamadas típicas a las frases de acción:
Las frases de llamada a la acción usan verbos de acción, como:
Regístrate
Llama
Suscríbete
Dona
Compra
Ordena
Comparte
Sigue
Descarga
Haga clic aquí para…
Una técnica útil para lograr que las personas actúen de inmediato es agregar un sentido de urgencia y el miedo a perderse de algo escaso o exclusivo. Por ejemplo:
La oferta vence en XX días.
Oferta por tiempo limitado.
Actúa ahora antes de que se agoten las unidades disponibles.
Responde antes del 30 de julio para inscribirse en este precio especial.
Creando una llamado a la acción efectiva
Aquí hay cosas que debe considerar al crear una llamada a la acción clara para aumentar sus tasas de respuesta:
No asumas que las personas saben qué hacer cuando leen tu anuncio o material de marketing. Obtendrás mejores resultados al tener claro lo que el cliente potencial debe hacer a continuación.
¡Coloca una CTA en todo! Asegúrate de que cada página de tu sitio web, cada conversación de ventas y cada publicación (digital o impresa) contenga una llamada a la acción claramente definida y fácilmente identificable.
Simple es mejor.
Las llamadas a la acción funcionan mejor cuando no son complicadas. No haga que tus clientes potenciales pasen por un laberinto, salten a través de aros en llamas… o siquiera que tengan que pensar 2 segundos. Si bien suele ser buena idea dar opciones al lectos (es decir, “Llámenos o envíenos un correo electrónico”), no les des tantas opciones ni les haga difícil cumplir con lo que quieres que hagan. Una acción simple, directa, es siempre lo más efectivo.
Siempre ten en mente el resultado final.
Pensá un objetivo final para cada llamada a la acción y cómo esa llamada a la acción puede encajar con otras partes de tu plan de marketing. Por ejemplo, podés tener una llamada a la acción para obtener un regalo de promoción al registrarse en tu lista de correo electrónico, que es el objetivo inicial. Pero quizás utilices esa lista de correo electrónico para enviar cartas de ventas con un llamado a la acción para “Comprar ahora”. Es posible que incluso tengas una venta adicional después de la venta (lo que se llama “upsell” en términos de marketing), con otra llamada a la acción. La suscripción por correo electrónico es el primer paso en el objetivo final de una venta.
Conoce las necesidades de tu audiencia.
Antes de que puedas escribir tu llamada a la acción, debes comprender qué podés ofrecer a tu audiencia y, lo que es más importante, por qué ellos necesitan tu oferta.
Las mejores prácticas para lograr esto son identificar un problema con el que tu audiencia pueda identificarse y posicionar tu marca como una solución a ese problema. Esto hace que la llamada a la acción sea más atractiva para la audiencia porque les da una razón para seguir tus instrucciones.
Una llamada a la acción es tan poderosa como el contenido que la rodea, ya que es justamente ese contenido lo que brinda el contexto para que la CTA sea verdaderamente efectiva. Si tu contenido no le dice a la audiencia exactamente cómo pueden beneficiarse del uso de tu oferta de una manera clara y atractiva, ni siquiera se preocupará por la llamada a la acción.
Usa verbos y frases accionables.
Casi todas las llamadas a la acción incluyen un verbo, pero algunos verbos son más fuertes que otros. Las palabras y frases de acción obligan al lector a realizar una tarea, que es el objetivo de una llamada a la acción. Los verbos procesables son aquellos que realmente pueden ser realizados por una persona en un sentido literal.
Por ejemplo:
Buen ejemplo: “Llámanos hoy para obtener una muestra gratis”: esto es procesable porque “llamar” es un verbo que puede realizar una persona.
Mal ejemplo: “Danos una llamada para obtener una muestra gratis”, aunque “dar” normalmente sería procesable, en este caso, lo que estás dando no es un objeto tangible. Literalmente no se puede dar una llamada telefónica a alguien.
La claridad es crucial
Una llamada a la acción sólo es efectiva si la audiencia la entiende claramente. Para empezar, si estamos hablando de CTA en medios gráficos, la tipografía debe ser fácil de leer, evita las tipografías pequeñas o demasiado rebuscadas que dificulten la lectura.
El mensaje en sí debe ser comprendido fácilmente. Un mensaje claro explica exactamente qué debe hacer la audiencia y cómo los beneficiará. Escribe tu llamada a la acción usando un lenguaje simple, evita la jerga propia de tu profesión o términos que podrían ser confusos para tus clientes potenciales.
Aquí hay un ejemplo:
Bien: “¡Visita nuestro sitio web! “
Mal: “Apunta tu navegador web hacia nuestra página de inicio”.
La acción debe ser lo más fácil posible.
El lector debe poder pasar directamente de la llamada a la acción para realizar la tarea en sí, así que asegúrate de tener todo lo que necesita para hacer un seguimiento.
Por ejemplo, si deseas que llamen, proporciona un número de teléfono bien visible, si querés que compren, coloca un botón de pago con color contrastante, buen tamaño y letras lo suficientemente grandes como para que no queden dudas de que ese es el botón que deben utilizar.
Obviamente, debes proporcionar una dirección si deseas que el cliente visite tu local, pero proporcionar un mapa real de tu ubicación ayuda a garantizar que no perderás una venta porque el cliente no encontró la dirección. Incluso, es muy fácil proporcionar un código QR con las direcciones de Google Maps para hacerlo aún más sencillo para el cliente.
Crea sentido de urgencia.
Una limitación de tiempo hace que tus llamadas a la acción sean un poco más fuertes porque agrega sentido de urgencia.
Ejemplo:
Bien: “Llámanos hoy”: este llamado a la acción le da a la audiencia una medida firme del tiempo para trabajar y crea un sentido de importancia.
Bien: “Llame ahora”: esto es aún más urgente e implica que la oferta puede no durar para siempre (incluso si ese no es el caso). La audiencia entiende la importancia de llamar pronto.
Malo: “Llame en cualquier momento”: esto implica que la oferta siempre está disponible y que no hay necesidad de llamar de inmediato, lo que hace que sea más probable que la audiencia se olvide de llamar por completo.
Si tu oferta tiene limitaciones, asegúrate de que esto está claramente descrito en tu llamada a la acción. Por ejemplo, “Llama ahora, los espacios son limitados” o “Llama ahora para aprovechar esta oferta por tiempo limitado”.
Responde las preguntas del lector
Los clientes desean saber qué sucederá si siguen tu llamada a la acción y cómo los beneficiará. Muchas personas en tu audiencia serán escépticas para seguir sus instrucciones, a menos que se les proporcione más información sobre lo que sucede después de hacerlo.
Por ejemplo, “Llámanos hoy” no es tan fuerte como “Llámanos hoy y te ayudaremos a ahorrar dinero en tus facturas de electricidad”. Este último le dice a la audiencia exactamente qué beneficio obtendrá al seguir la llamada a la acción.
Derriba los temores de tu audiencia
Las frases de llamada a la acción se pueden usar para ayudar a tu audiencia a superar cualquier objeción que pudieran tener. Identifica y destruye cualquier duda que tu público pueda tener hacia tu oferta y agrega declaraciones que le brinden tranquilidad.
Por ejemplo, es posible que un lector no quiera llamar porque teme ser atrapado en un largo discurso de ventas. Entonces, podrías decir algo como “Llama ahora y en menos de quince minutos obtendrás una respuesta a tus consultas”.
Proporciona tantos detalles sobre el proceso como sea posible, incluida cualquier limitación que tu oferta pueda tener. Guía al lector a través del proceso de qué esperar cuando sigan tu llamada a la acción. Cuando sigan tus instrucciones y los resultados sean lo que prometiste, habrás ganado su confianza y, con suerte, un nuevo cliente.
Haz una oferta que no puedan rechazar.
A veces, una oferta especial puede hacer mucho para convencer a los más escépticos de la audiencia para que sigan tu llamada a la acción. Esto podría ser un regalo gratuito, garantía, descuento especial u otros incentivos para endulzar el trato.
Ejemplo:
“Hacé tu pedido hoy y obtené envío gratis”.
“Regístrate en nuestra lista de correo para recibir cupones especiales para suscriptores”.
Recordá ser directo y claro en tu CTA si hay alguna limitación en tu oferta, como un límite de tiempo o un límite de unidades por cliente.
Usa repeticiones
La repetición hace que tu CTA sea más efectiva. Repite tu llamada a la acción de diferentes maneras y en diferentes áreas para asegurarte de que el mensaje es claro.
Ejemplo:
Supongamos que estás diseñando un folleto de varias páginas, una buena idea es incluir diferentes variaciones de la misma llamada a la acción
“Visítenos en la esquina de Calle A y Calle B para recibir una cotización gratis”
“Venga a nuestra ubicación en el centro de la ciudad para obtener una cotización gratuita”
“Solicite su presupuesto gratuito en nuestra ubicación de Calle A y Calle B”.
“Visita nuestro local del centro hoy para recibir tu cotización gratis”.
Si tus materiales de marketing tienen varias páginas, entonces cada página debe contener una repetición del llamado a la acción. De esa manera, el cliente no tiene que ir a buscar para saber qué hacer cuando esté listo para dar el siguiente paso.
Conclusión
Como en la mayoría de las cosas, la maestría se adquiere con la práctica, y es probable que tengas mejores ideas de llamadas a la acción una vez que te hayas familiarizado con el proceso. Tómate el tiempo para realizar ejercicios de escritura, y encuentra diferentes maneras de instruir a tu audiencia y de dirigirlos hacia el objetivo final de tu marca.
¿Qué tipo de llamadas a la acción consideras que son efectivas en tu negocio? ¿En qué CTA has actuado vos en el pasado?
Aquí hay una llamada a la acción para vos: comparte sus respuestas, tips y ejemplos en los comentarios 😉
Lorena Busso
Convirtiendo ideas en negocios online reales y rentables… a tu manera
Licenciada en sistemas, coach, experta en marketing online, madre de 3 y virgo.
Trabajo con coaches y profesionales que se dedican a brindar servicios, que quieren hacer crecer sus negocios utilizando internet.
Ayudo a mis clientes a ver y concretar nuevas posibilidades de negocio. Los guío paso a paso en cómo usar herramientas e implementar técnicas de marketing de la mejor forma posible. Logrando así un negocio que se adapte completamente a la misión de cliente y diseñando juntos la mejor estrategia de marketing online, para que ese mensaje realmente llegue a la mayor cantidad posible de clientes potenciales.
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