LISTOS? PREPARADOS? … ZZZZZZZZZ … Y LA ACCIÓN?
Querés emprender, querés entregar algo de TU creación al mundo. Y soñás, y diseñás, y planificás … y no accionás.
“Todavía no tengo la página Web”
“ Me falta formarme en 75 cosas más para estar lista/o”
“ Todavía no me está saliendo como me gustaría”
Y tantas otras frases, para justificar la NO ACCIÓN.
Se imaginan si de bebés hubiéramos dicho “todavía no tengo el piso lustrado para caminar y mostrarle a mamá”, “todavía no me sale la ‘m´ muy bien así que voy a esperar para decir mamá” , “no estoy corriendo con mucha gracia así que me quedo sentadita/o hasta que pueda correr mejor y me voy a jugar con los otros chicos”… ¿dónde y cómo estaríamos ahora?
¿Y se imaginan si a la primera caída nos hubiéramos quedado sentados de por vida, o si al primer balbuceo torpe con las seguidas risas de mamá y papá nos hubiéramos ofendido y nos hubiéramos quedado mudos?
¿Cuál es la diferencia entre ese momento de la vida y este momento?
Que en ese momento teníamos TOTAL CONEXIÓN CON NUESTRO IMPULSO Y NUESTRO DESEO; NO HABÍA OTRA COSA MÁS IMPORTANTE QUE HACER LO QUE SURGÍA DE NUESTRAS ENTRAÑAS.
Y pueden decirme “¡eramos niños! ¡No analizábamos , no planificábamos, no evaluábamos riesgos!”.
Y tienen razón, lo tomo. Y me inclino a agradecer a la Madre Naturaleza que haya dispuesto las cosas en ese orden.
Cuando crecemos, y empezamos a sentir que queremos progresar, ser exitosos, y salir adelante muchas veces sentimos un “tironeo” entre el pensar y el hacer.
Dada nuestra cultura suele ganar el pensar y nos quedamos frustrados, llenos de sueños que no nos movemos por cumplir.
Entonces cuando llega el momento de la acción es como si fuéramos en una moto por la ruta y de repente ésta se cortara y hubiera precipicio y la única forma de seguir en el camino es dar un salto de 2mts para retomar la ruta.
La pregunta que te hago es: ¿Qué es lo que haría que saltes?
Probablemente el huir de algo que viene detrás tuyo por ejemplo.
Quizás lo maravilloso que te espera del otro lado del precipicio.
Y te aseguro que si alguna de estas variables (o ambas) son lo suficientemente fuertes, vas a saltar, vas a saltar y no te va a importar caer parada/o, de rodillas, despeinada/o o con los calzones bajos. Vas a saltar porque hay un DESEO, HAY UN MOTIVO, HAY ALGO TAN FUERTE QUE PULSA ADENTRO TUYO QUE NO EXISTE OTRA POSIBILIDAD.
Para qué hago todas estas analogías?
Para que entiendas que estás buscando en el lugar equivocado. No te animás a saltar , no porque no tengas la web o la cosita perfecta, o el flequillo bien cortado. BASTA DE EXCUSAS! Si tuvieras todo aún buscarías un motivo para no hacerlo. Seguirías sin animarte.
No te animás a saltar porque no te asociaste fuertemente a TU DESEO, a lo que te hace vibrar, y a los motivos por los cuales eso es VITAL (si, vital, como el llamar a mamá para un bebé) para tener la vida que soñás.
En el camino de la planificación te olvidaste de por qué y para qué elegiste lo que elegiste.
Ocupate de volver a conocer tus motivos, y vas a volver a sentirte como ese bebé que se volvía loco por ir corriendo a perseguir esa mariposa. Ocupate de volver a sentir un fuego pulsante que te pide saltar y vas a decir “hola que tal” aunque nadie te entienda en un principio.
Ocupate de jugar y vas a crecer.
Accioná de manera imperfecta, torpe, como quieras llamarlo. Pero accioná. No existe otra forma de darte cuenta si vas por el camino correcto o no. Y cuando te caigas (porque a todos nos pasa), pregúntate qué duele más: no conseguir lo que deseaba o dejar de intentarlo?
Te dejo con estas reflexiones y te recuerdo que podés trabajar con mi programa ACTIVATE YA, para activarte al cambio y salir del estancamiento.
Con sólo unos audios cortitos, en 3 días vas a activarte para seguir en tu camino de avance hacia tus sueños.
Aquello que más te atemoriza encierra la mayor liberación. Estás a una acción de distancia. ¿Qué esperás?
Consultame por privado!
